Una lesión por latigazo (o esguince cervical), ocurre como resultado de un choque automovilístico cuando la cabeza se mueve rápidamente de forma descontrolada en distintas direcciones. El movimiento de adelante hacia atrás se describe como una lesión clásica por “latigazo”, pero una lesión por movimiento lateral, rotacional o una combinación de ambos ocurre a menudo, especialmente si agregamos el factor de que la cabeza estaba girada o volteada al momento del impacto, sin importar en qué dirección es golpeado el carro. ¡Este mes, hablemos del tratamiento!
Piensa en el “cómo lidiar con una lesión por latigazo” como una serie de pasos:
Paso 1: Busca ayuda quiropráctica INMEDIATAMENTE después de sufrir una lesión por latigazo cervical: Esto es importante pues los estudios muestran que tratamientos tardíos son asociados con resultados desfavorables a largo plazo. Para evitar una incapacidad prolongada, ¡NO ESPERES! El dolor suele asustar a las personas y hacerlas pensar de manera cerrada y sobreprotectora. Mientras más esperes, peor será la rigidez muscular, los espasmos, el debilitamiento, y ¡el miedo a realizar diversas actividades por el dolor!

Paso 2: Reduce la inflamación: Las palabras “dolor” e “inflamación” se consideran grandes sinónimos. Si te sientes “lastimada”, estás “inflamada”. Debemos comenzar con medidas antiinflamatorias tan pronto como sea posible después de sufrir una lesión por latigazo. El MEJOR/más seguro enfoque es una compresa helada – Póntela y retíratela cada 15 minutos (una sesión debería durar 1.25 horas) tres veces al día o CONSTRASTA frío y caliente (10 minutos frío, 5 caliente; alterna tres veces, comienza y termina con el frío. Duración de 40 minutos). AMBOS métodos producen un efecto de FLUJO para reducir la inflamación rápidamente. También tienes la opción de medicamentos de libre venta como aspirina, ibuprofeno, y naproxeno; pero estos AINES (antiinflamatorios no esteroideos) conllevan efectos secundarios significativos para algunas personas, siendo el dolor de estómago o irritación el efecto secundario más evidente (convirtiéndose después en daño al hígado y riñón), ¡así que ten cuidado! ¡No querrás tener que tratar una úlcera además de tu lesión por latigazo! Considera nutrimentos, hierbas, vitaminas y comida antiinflamatoria – Son seguros y efectivos (hablamos sobre éstos previamente – INVESTIGA en la red para más información).

Paso 3. EVITA LA INACTIVIDAD: Esto es importante ya que la cosa más “natural” es no hacer nada, “¡…porque me duele!”. NOSOTROS te guiaremos en este proceso pues necesitas saber cuánto y qué tipo de actividad es segura y apropiada para ti. Tienes que “interpretar” si ese dolor es seguro o peligroso y reaccionar acordemente. DEBES decirnos el tipo de dolor (punzante, agudo es dañino; un dolor por estiramiento de músculos es seguro), cuánto dolor tienes (de 7-10 en una escala de 0-10 es potencialmente peligroso), qué tan seguido lo experimentas y qué te ayuda/empeora el dolor (qué has probado y sabes que te funciona hasta ahora). DESPUÉS, ¡te guiaremos apropiadamente (con tu ayuda)!

Paso 4. REALIZA TUS ACTIVIDADES NORMALES:
Continua con tu vida diaria, ya que evitar el trabajo y demás actividades diarias te lleva al “pensamiento de discapacidad” (pensar que estás peor de lo que realmente estás). NO DEJES QUE ESO SUCEDA. ¡Habla con nosotros!

Paso 5. EVITA estar malas posturas de forma prolongada: Ya sea en una conversación con una persona que NO está sentada directamente frente a ti, una posición incorrecta del monitor de la computadora, hablar dentro del vehículo sin girar el cuerpo, o hablando por teléfono, ¡MANTEN UNA BUENA POSTURA!

Paso 6. COMPROMETETE con un programa de ejercicios en casa: ¡Esto es sumamente importante! Nosotros te guiaremos en este proceso. Comenzaremos con hielo y posteriormente, posiblemente, un aparato de tracción cervical, ejercicios isométricos seguidos por Theratube y band (isotónicos), entrenamiento de postura, y mucho más. NECESITAS ayuda en esta área – ¡Permítenos AYUDARTE!