Un latigazo cervical suele ocurrir como resultado de un choque automovilístico cuando (típicamente) hay una deceleración o parada repetida que ocurre a tal velocidad que la persona no puede prepararse al impacto, incluso cuando sabe que el choque es inminente. Esto se debe a que el “latigazo” no dura más de 500ms y nosotros no podemos contraen voluntariamente un músculo más rápido que alrededor de 800 ms. La magnitud de la lesión se ve afectada por diversos factos, incluyendo: 1. Objeto impactado pequeño / vehículo que impacta grande; 2. Asiento demasiado inclinado; 3. Reposacabezas en mala posición; 4. Un asiento “elástico”; 5. Un cuello largo y delgado (mujeres > hombres); y 6. Que la cabeza haya estado volteada al momento del impacto. En muchos casos, poco se puede hacer para evitar una lesión. Entonces, ¿cómo ayudan los rayos X?

Usemos el clásico “choque por detrás” como ejemplo. La conductora lleva puesto el cinturón de seguridad, viaja en un auto compacto, y está detenida por el tráfico. De repente, el automóvil es golpeado por detrás por una camioneta pick-up de 3/4 de tonelada (“vehículo que impacta”). Justo antes del impacto, la conductora, asustada por el chirrido de los neumáticos al frenar repentinamente, gira su cabeza para mirar hacia atrás a través del espejo retrovisor. Al momento del impacto, el automóvil es impulsado al frente y siente su cabeza acelerar hacia atrás inicialmente (50-150ms), sobrepasar el reposacabezas (porque estaba demasiado bajo) y después acelerar al frente (150-300ms), sin llegar a golpear el volante (la bolsa de aire no se activó). Su cabeza vuelve a la posición vertical (~500ms) y entonces informa que está “alterada”. Visita a su quiropráctico y una examinación revela dolor en el cuello al llegar a los extremos de la flexión hacia adelante y hacia atrás, dolores de cabeza, entumecimiento desde el brazo izquierdo hasta el lado del pulgar de la mano y debilidad en ciertos músculos del brazo y la muñeca. El quiropráctico solicita rayos X de flexión-extensión para la columna cervical como se muestra a continuación:

whiplashxray

Los rayos X son explicados al paciente de la siguiente manera: “…La imagen del medio muestra una curva cervical invertida al inclinarse hacia delante, pero observa lo poco que la columna vertebral y la cabeza se han movido al frente. Duele ya sea porque los ligamentos que mantienen los huesos unidos se sobre estiraron o se desgarraron, lo cual es conocido como “esguince”. Si la cabeza y el cuello son forzados suficientemente hacia adelante, algo tiene que ceder. O los huesos se fracturen o los ligamentos se desgarran, o ambos. Cuando los ligamentos se desgarran, los huesos se separan o se abren más allá de los niveles superior e inferior (observa las dos flechas). Esto crea un ángulo más bien agudo, como si alguien hubiese roto una vara. Mirando con detenimiento los rayos X, notará que las vértebras superiores parecen estar deslizándose hacia adelante (C4 sobre C5), lo cual apoya la idea de ligamentos desgarrados y pérdida de estabilidad”.